Cómo tiene que ser una silla ergonómica

¿Qué requisitos debe cumplir una silla para ser ergonómica? No existe un blanco y negro para calificar si una silla es ergonomica o no, sino un baremo de más ergonómicas y menos ergonómicas. En este post detallo las características que entran dentro de ese baremo; de la cantidad de piezas regulables, de los sistemas de reclinación, de la calidad de materiales y del set de escritorio como factor ergonómico externo que se suma a la experiencia ergonómica completa.

Cuantas más piezas regulables, más posibilidad de que tu cuerpo esté bien apoyado a cada parte de la silla. Las piezas a regular son:

Asiento

Se regula en altura y en profundidad. Ésta última función permite colocar el asiento más cerca o lejos del respaldo, y se encuentra en modelos de más de 150 euros.

Respaldo

Se regula normalmente en inclinación. A partir de sillas de gama media encuentras modelos que se regulan en altura y en algunas ocasiones tienen regulación de profundidad, que sería lo mismo que tener regulación de profundidad en el asiento pero en este caso, en el respaldo.

Soporte lumbar

Se regula en altura y tensión. Hay mecanismos muy diversos y dependiendo de la calidad algunos dejan que desear. Algunos usuarios se quejan de que algunos soportes son muy duros y se te clavan en la espalda en vez de recogértela, aunque esa opinión puede variar según el peso de la persona. Según los modelos puedes encontrar solo regulación de altura. Incluso en modelos de gama alta (rondando los 500 euros) no encuentras ninguna de las dos funciones. Sacrifican este soporte para tener un aspecto más estético y minimalista a cambio de poder regular el asiento en altura (que de esta manera consigues ajustar la zona lumbar) y en la forma del respaldo marcan una prominente curva para la zona lumbar.

Si la malla es lo suficientemente flexible y resistente, el lumbar puede quedar bien apoyado.

Reposabrazos

Puede llegar a regularse en 5 movimientos: en altura, delante/atrás, para adentro/fuera, en rotación y en inclinación. Algunos modelos incluyen los 4 primeros ajustes y lo identificarás en las fichas técnicas con el nombre 4D (D de dimensiones) En modelos gaming sueles encontrar el movimiento de inclinación.

Y si el mecanismo es sofisticado, al reclinarte hacia atrás, la inclinación del apoyabrazos se posiciona en sintonía con tu postura echada hacia atrás. Esto suele ser más común en sillas gaming o en sillas de oficina caras.

Reposacabezas

Se regula en altura, inclinación (también llamado «ángulo») y en profundidad. Es más común encontrar modelos con las 2 primeras regulaciones. Sin embargo, aunque parezca extraño algunos de los modelos más top, no traen este accesorio. Lo consideran innecesario para su modelo de silla, como es el caso de la Aeron de Herman Miller, que está pensada para un uso activo de trabajo en oficina.

El sistema de reclinación es el mecanismo que te permite echar hacia atrás y hacia adelante el respaldo, o el respaldo + el asiento. Existen diversos mecanismos, unos se bloquean a distintas alturas, otros solo permiten el balanceo, algunos más sofisticados disponen de anti-shock, otros pueden cambiar el ángulo del asiento independiemente del respaldo, etc.

Algunos de estos mecanismos de reclinación son más ergonómicos que otros, aunque si eres una persona dada a no reclinarse demasiado en su silla, tal vez no te importe ahorrarte dinero en esta función, porque los mejores mecanismos de inclinación están en sillas de 500 ~ 1000 €.

En este post sobre distintos tipos de reclinamiento explico más en detalle su funcionamiento y cuáles son más ergonómicos.

Distinguir si la calidad de un material es mejor o peor no es algo intuitivo, y menos, si no tienes la posibilidad de tocarlo o probarlo antes de comprar el producto. Aún así, te daré unas nociones básicas de los tipos de materiales que se suelen usar:

Base

Es de esperar que las peores bases son de plástico. Luego las puedes encontrar de acero que son robustas y estables pero algo pesadas, sin embargo, las de aluminio son las mejores porque no solo son resistentes sino que además, ligeras. Y para modelos top de gama como la Aeron de Herman Miller encontrarás una base de grafito, «el material élite de las bases».

Ruedas

En gama baja, incluso media, encuentras ruedas de plástico que no suelen ser aptas para suelos de madera porque pueden rayarlos. Por esa razón, algunos compradores se preocupan en comprar ruedas de goma para curarse en salud.

No solo el material de las ruedas es un punto a fijarse, también, dependiendo del diámetro, consigues un rodamiento más suave, incluso para suelos tipo alfombra o moqueta. Si vas a rodar en una alfombra de pelo alto, 7 cm de diámetro en adelante es una buena medida.

Tela

Los tejidos más comunes son: el cuero, el polipiel y la malla de puntos. Básicamente, el cuero es un material acolchado pero caluroso y puedes llegar a sudar en él al igual que con el polipiel o piel sintética solo que éste es una imitación del cuero y despendre un olor a plástico algo desagradable y la tela se deteriora con facilidad. Claro está que la piel sintética es barata y en las sillas con cuero original se dispara el precio. Luego, la malla de puntos es más transpirable, más fresca pero no da una sensación amollada, sin embargo, a cuanto más se escale de precio, el material es bastante más flexible y envolvente, es decir, se siente un tejido cómodo y resistente. Las mallas más malas acaban aflojándose con el paso del tiempo.

Piezas

En cuanto a piezas, aparte de que las hay con acabados de plástico baratucho o de plástico más duro, de metal, etc., puedes encontrar piezas que no quedan finamente ajustadas. Es común ver algún respaldo levemente torcido o reposacabezas algo endebles, o acolchado no uniformemente repartido. En las sillas de alta gama eso es algo que no ocurre porque diseñan sus piezas exclusivamente pensadas para su modelo de silla. En sillas de gama media, según el modelo, los acabados pueden estar más o menos afinados.

No solo la ergonomía de tu silla depende de tu silla, válgame la redundancia😆 Sino que también depende del escritorio, siempre y cuando sea tu caso y trabajes sobre una mesa. Puede llegar a darse el caso de que quieras una silla y que casualmente los reposabrazos topen con el borde de la mesa, o que necesites elevar la altura de tu asiento y como resultado, la mesa se quede baja. Para ello, existen mesas regulables en altura.

Algunos modelos se regulan con manivela. Puedes ver algunos ejemplos aquí. Otros, para mayor comodidad son escritorios eléctricos, aquí verás sus precios. En cambio, si eres de los que usa una silla de rodillas (que no tiene reposabrazos) y quieres colocarte en una posición alta, también puedes optar por comprar soportes de elevación para tu orenador. Echa un vistazo al catálogo.